La pianista Mine Kawakami
” Cuando era pequeña pensaba que en el mundo sólo existían los artistas.”
Usted es una pianista profesional muy activa. ¿Por qué quiso ser pianista cuando era pequeña?
Mi padre quería ser un pintor y posteriormente fue profesor de una universidad de bellas artes. Mi madre era ilustradora de libros y mi hermano es escultor. Todos los miembros de la familia son artistas.
Además vivíamos en una residencia oficial de la universidad de bellas artes en la que trabajaba mi padre. Por lo que todas las personas de mi alrededor eran artistas. De hecho, cuando era pequeña pensaba que en el mundo sólo existían los artistas (sonríe). Tenía una vecina que era pianista y por su influencia comencé a tocar el piano cuando tenía tres años. A partir de ese momento, siempre tuve el piano muy cerca de mi. Por lo que, más que querer ser una pianista, he vivido siempre junto con el piano, y por ello hoy estoy aquí.
” Yo convertí las montañas y los estanques de mis recuerdos en melodías, y los toqué en mi piano. “
Hasta ahora, usted ha publicado muchos CDs y también ha dado muchos conciertos. ¿Cuál es el trabajo que más recuerda?
Tengo muchos recuerdos en todos los trabajos que he hecho, pero tuve una experiencia especial en uno de ellos. Yo nací en Nagakute, en la provincia de Aichi, Japón. Es una parte rural. Allí fue donde se celebró la Aichi EXPO (Exposición universal de Aichi). La residencia de la universidad donde vivíamos cuando yo era pequeña estaba realmente dentro de un bosque. Sin embargo, incluso esa zona comenzó a ser víctima del desarrollo urbanístico y comenzaron a cortar los árboles. Un día desapareció el árbol en cuyo alrededor yo jugaba. Sentí mucho por ese cambió, pero los recuerdos de mi infancia se quedaron dentro de mi. Yo convertí las montañas y los estanques de mis recuerdos en melodías, y los toqué en mi piano.
En ese concierto estuvo un productor que no sabía que había nacido en Nagakute, él me propuso usar mi música para la Aichi Expo, ya que con ella sentía la atmósfera de esa zona. Ese fue el comienzo de mi trabajo para la Aichi Expo y después hice los CDs de “Morizo y Kikkoro” y “In the Forest”. Primero estuvo la atmósfera donde yo crecí y después vino una persona que no sabía nada de ello y lo comprendió. Fue un trabajo muy especial.
¿Quiere decir que la Aichi EXPO fue un escalón importante para su trabajo?
Fue mucho más que un escalón. Después de la Aichi EXPO empecé a recibir muchas ofertas de trabajo. Fue un año de gran cambio para mi.
” El paisaje de España y de Japón también lo convierto en sonidos como si un pintor lo dibujara. “
” No podía pensar que la música clásica moderna fuese algo bello. “
En sus obras, hay las que tratan el tema o la cultura de España y hay también las que tratan la tierra y la cultura de Japón. Cuando compone música pensando en España o Japón, ¿cómo intenta expresar las características de cada país?
La música es exactamente igual que la pintura para mi. Pienso que cualquier cosa que exista en este mundo puede convertirse en una melodía. Cosas que he visto y que me han impresionado, prefiero convertirlas en sonidos antes que sacar fotos.
El paisaje de España y de Japón también lo convierto en sonidos como si un pintor lo dibujara. Más que una creadora de melodías, creo que soy una impresionista. Cada persona, o sabor de cada vino tiene sus sonidos y puedo sacarlos siempre que tenga algo de tiempo. Me encanta ir convirtiendo todo en una melodía.
He vivido también en Alemania y practicado la música clásica durante mucho tiempo, y comencé a sentir una frontera que yo no podría traspasar en el mundo de la música clásica. Esa frontera era que, no podía pensar que la música clásica moderna fuese algo bello. A un compositor se le ocurre una idea nueva y sube los teclados con los tornillos, o se mete por debajo del piano…
Aquella parecía una carrera para ver quién hacía la cosa más rara, y no me divertía tocando esas piezas. Era una situación para ver hasta qué punto se expresa el ego de cada compositor. En cambio, en la música de la época del renacimiento, la edad media o el barroco, creo que lo más importante era crear un sonido más bello. Personalmente pienso que la música va a volver a este punto de origen.
Usted vive entre España y Japón. ¿Por qué vino a España para vivir?
Fue una intuición. Podría decir que fue un flechazo. Vine a un festival de música en El Escorial que también era una mezcla de conciertos y seminarios, y sentí que todo lo que veía a mi alrededor era muy bello, desde que me levantaba hasta que me acostaba. Todo era bello y el sonido del piano era realmente transparente. Todo lo que comía estaba bueno. Tal vez finalmente decidí vivir en España por la comida (sonríe). Creo que fue una mezcla de intuición y la comida.
También me gustó mucho que los españoles sean menos rígidos, en un sentido positivo.
Usted vivió en Alemania y también en Cuba. ¿Qué recuerda de esos países? ¿Tuvo problemas en algo?
De todos los sitios en los que he vivido tengo muchísimos recuerdos. He vivido en muchos países, pero en realidad, siempre me acompañó un tema fundamental, que es el piano. Viajé para encontrar la música que yo buscaba, y cuando miro hacía atrás, en mi camino están Alemania y Cuba, y también España. Pero siento que al final he elegido los países que tienen las energías musicales más explosivas. En el aspecto musical, no tuve ningún problema en ningún sitio.
Pero puedo contar que, en Cuba, a menudo encontraba pianos que sólo tenían la mitad de los teclados, o que en el interior vivía un murciélago. Cuando llovía, llovía hasta en el interior de la casa. Si había un corte de luz, todo el país se quedaba sin luz. Que no hubiese agua, fuego o combustible era algo diario, por lo que desayunaba un mango, comía un platano y cenaba un aguacate, lo que hacía una vida muy macrobiótica. Pero no sentía eso como una dificultad para mi. Yo me lo pasaba bien. Veía cómo se movían las nubes y cómo llovía de esas nubes según pasaba el tiempo. Era una experiencia impensable si viviera en Tokio.
Pero una vez tuve un gastroenteritis muy seria en Cuba. Comí una papaya muy madura y extrañamente deliciosa, después estuve en cama durante tres días casi sin recuperar el conocimiento. Eso si que fue un momento complicado.
” Fue una experiencia muy fructífera estar en Alemania en una época muy sensible de mi vida y haber podido estudiar la música alemana. “
Y ¿qué tal en Alemania?
Fuí a Alemania cuando tenía 18 años para estudiar en la facultad de piano, en una universidad. Estudié música clásica hasta que me gradué. Fue una experiencia muy fructífera estar en Alemania en una época muy sensible de mi vida y haber podido estudiar la música alemana, como Bach, Brahms o Beethoven.
Los alemanes son muy eficientes y saben explicar con razones cualquier cosa. Saben separar cosas correctas e incorrectas claramente, y pueden expresar sus opiniones aunque eso pueda herir a la gente que las oiga. Creo que los alemanes son los que tienen una mentalidad más lejana que la de los japoneses, hablando de los países en los que he vivido hasta ahora.
Sin embargo, haber vivido en Alemania fue una experiencia muy positiva. Los españoles se dejan llevar más según la situación, y por ejemplo dicen “Vamos a tomar algo, aunque hoy tengo un trabajo que hacer…” (sonríe). Los alemanes no hacen eso. A veces la gente habla de una similitud entre Alemania y Japón, pero yo creo que simplemente tienen una parte en común, pero las partes que se quedan fuera de esa en común, están muy alejadas mutuamente.
Usted compuso la música principal para el Año dual España-Japón 400 años de relaciones, y tocó el piano siendo la directora artística en la ceremonia musical de la apertura de este Año dual en junio de 2013 celebrada en el Teatro Real de Madrid, en la que asistieron los príncipes de Asturias y el príncipe heredero de Japón. ¿Cómo comenzó este trabajo? ¿Tiene alguna anécdota de ello?
Fue un trabajo que nació por unas fuerzas fantásticas. Ocurrió el terremoto del noreste de Japón en 2011 y la gente comenzó a pensar en aquella zona. Yo empecé a escuchar sobre Hasekura Tsunenaga (el Samurai que vino a España hace 400 años desde el noreste de Japón) y personalmente tuve mucho interés sobre la relación entre Japón, la parte noreste, y España. Al mismo tiempo, me enteré por parte de la embajada japonesa que estaban planeando un evento para el año dual España-Japón 400 años de relaciones, y hablando con el equipo, nació la idea de esta obra, que es como si el agua saliera de la tierra por una fuerza maravillosa. Me alegré mucho de haberme podido sentir así haciendo este trabajo. Conocí a mucha gente estupenda cuando visité varias veces el noreste de Japón, ya que quería conocer más sobre Hasekura. También encontré las antiguas raíces de Japón en estos esos viajes.
¿Visitó usted misma el noreste de Japón?
Si, muchas veces. Visité la tumba de Hasekura, Tsukino-ura (el puerto desde donde Hasekura partió hacia España hace 400 años), Méjico y Filipinas. He seguido toda la ruta que hizo la misión de Hasekura. Bueno, excepto la ruta marítima. Hice la misma ruta en avión en lugar de barco (sonríe). No puedo componer la música si no veo las cosas con mis propios ojos. Después, la gente de NHK (la televisión pública de Japón) también se apuntó al proyecto y todo esto se iba convirtiendo en un vórtice gigante. Fue una experiencia maravillosa poder sentir ese vórtice y ver tantos milagros que no se pueden explicar, que no eran casualidades. El Sr. Sato (El Sr. Satoru Sato, Embajador de Japón en España) fue otro factor clave. Si no fuera por él, no habría nacido este proyecto. Es una persona que ve el arte con un corazón muy abierto y ayuda a hacer todo lo que sea necesario. Estoy muy agradecida por su apoyo.
Y así nació el CD de “Sonata Samurai”.
Si, así es. En realidad, me gustaría explicar el sentido de cada sonido ya que todos los sonidos tienen sus significados. Pero lo dejamos por hoy ya que como comencemos con ello va a ser algo tremendo (sonríe).
” No hay música que no me guste. “
A parte del piano, ¿qué tipo de música le gusta?
Más bien, no hay música que no me guste. Dentro de mi, no tengo categorizado la música, como por ejemplo, la música clásica o rock. Hay momentos que te sientes muy limpia mentalmente cuando visitas un templo, es algo así, como sentir una frescura. Como si una brisa sopla dentro de ti. Me gusta toda la música que cause esa sensación. Si me preguntan si me gusta el Jazz, tendré que decir que hay Jazz que me gusta y también hay Jazz que no me gusta. Pero creo que no me siento atraída por la música heavy metal. Ahí no me sopla la brisa (sonríe).
A parte de la música, ¿qué le gusta hacer? ¿Qué hace normalmente en un día de descanso?
Me gusta mucho cocinar y dibujar. También me gustar escribir.
¿Qué tipo de cocina hace?
Otra vez es sin categorizar. Hago de todo. Cocino mejor que toco el piano (sonríe). Cuando compongo música, voy y vengo entre el piano y la cocina. Cuando no me sale la música, voy a pelar una zanahoria y vuelvo al piano para seguir trabajando. Y otra vez voy a la cocina para saltearla. Entonces cuando termina un día, tengo hechos un montón de platos, pero mi marido no se lo puede comer todo. ¡Qué lástima!
¿Qué le gusta dibujar?
Me gustaba mucho dibujar cómics y dibujaba mucho manga. Ahora dibujo ilustraciones. De vez en cuando, hago dibujos para los libros. Estoy un poco obsesionada ahora por dibujar patrones, como mosaicos. Siempre dibujo sin color, con un rotulador o un lápiz.
¿Y de escribir?
Escribo ensayos. Hace tiempo en Alemania había un periódico para los japoneses que se llamaba “Guten Tag” y escribía para él. Ahora escribo en algunas revistas y también escribo un artículo para una revista española sobre la cocina japonesa.
Si la invitaran a viajar durante un mes a cualquier lugar del mundo, ¿dónde le gustaría ir?
Me encantaría ir a un sitio donde pueda escuchar muchos truenos. El Amazonas o la zona de la jungla tropical. Donde haya muchos truenos y chubascos fuertes.
” Me encantan los truenos y la lluvia. No creo que se pueda encontrar un sonido más bonito. “
¿Por qué truenos?
Me encantan los truenos y la lluvia. No hay otra cosa que me excite más y no creo que se pueda encontrar un sonido más bonito. Mi madre me dijo que cuando yo nací sonaban truenos. Viví durante dos meses en Medillín, Colombia. Es una ciudad que está en las tierras bajas, no como Bogotá, y todos los días a la misma hora, llovía a cántaros. Me encantaba eso, y yo lo esperaba con un café. Y hacíamos comentarios sobre cada trueno. “Ese era bueno” o “Que suene otra vez…” ¿Cree que puede haber otra cosa que refresque más que eso? También me encanta ver como se iluminan las nubes de diferentes formas. Ver los relámpagos me hace muy feliz. Una vez bajaba por el río Amazonas en Bolivia y oí un trueno realmente fuerte, crees que has perdido el oído un momento, y luego sopla un viento que casi te vuelca el barco. Fue excelente. Me entristece un poco que en España no haya muchas nubes. Es muy raro poder ver relámpagos en Madrid. Bueno, quizá lo de que no lo puedas ver todos los días tampoco está mal (sonríe). Pero si lo comparo con la lluvia suave y constante de Alemania, yo preferiría España.
” Digamos que quiero hacer una campaña de “Abramos el piano”. “
¿Qué tipo de música quiere hacer para el futuro? ¿Qué quiere estar haciendo dentro de cinco años?
Tengo varios objetivos, pero por ejemplo, casi todas las mujeres de mi generación tocaban piano. Todo el mundo tenía un piano en casa. Todas las chicas practicaban con Czerny o hasta el superior de Bayer, pero más tarde, por alguna razón, han dejado de tocarlo. Ellas llegan a los cuarenta o cincuenta y ya terminan el cuidado de los niños, y otra vez se enfrentan con ellas mismas. Recibo muchos correos de las mujeres de esa edad y me hace sentir que desean tener un corazón más libre. Dicen que cuando escuchan mi piano, pueden ser más tiernas, que incluso han llorado.
Pero yo creo que, todo el mundo que haya tocado piano alguna vez, pueden crear esos sonidos. Digamos que quiero hacer una campaña de “Abramos el piano”. En sus casas el piano se ha convertido en una estantería, y primero tenemos que quitar las cosas que están encima (sonríe). Quiero escribir libro de música de piano que la gente que tenga el nivel de Bayer pueda tocar y disfrutar, y que se pueda sentir aliviada con ella. Tocar piano te da una frescura mental. Me gustaría transmitir el sentido de la existencia del piano como un método de alivio de la mente.
” Antes todos escuchaban muchos tipos de música y ahora creo que cada uno busca un sonido para mover algo que tiene dentro de si. “
Puede que eso sea algo que espera mucha gente.
Yo creo que sí. Cuando veo la generación a la que pertenecen quienes vienen a mis conciertos, creo que es algo necesario en esta época que vivimos. La gente busca estar aliviada y el momento en el que pueda sentirse feliz. Antes todos escuchaban muchos tipos de música y ahora creo que cada uno busca un sonido para mover algo que tiene dentro de si. Me gustaría seguir creando una música así, pero también hace falta una música que pueda tocar la gente con facilidad en el Japón de hoy.
” Es un proyecto de conectar los dos caminos de peregrinación de España y Japón. “
¿Qué planes tiene para los próximos meses?
Si la música del concierto para la apertura del Año dual España-Japón 400 años de relaciones en Junio de 2013 fue la ida del viaje de Hasekura Tsunenaga, va a haber un concierto para celebrar la clausura del Año dual el martes 15 de Julio, que significará la vuelta de su viaje. Ahí tocaré una música nueva que he compuesto usando de tema el regreso de Hasekura de España a Japón y su posterior fallecimiento, y después los transcurridos 400 años. Esa música también saldrá en CD.
El 27 de septiembre, daré un concierto en el templo de Kiyomizudera en Kyoto. Este concierto lo vengo dando todos los años y este año va a ser la décima vez.
En Noviembre, tenemos un trabajo de colaboración con el duo cómico famoso “Sandwitchman”. Los dos miembreos de Sandwitchman son de Sendai (noreste de Japón) y yo soy muy fan de ellos desde hace tiempo. Vamos a presentar una obra que es una mezcla de sus actuaciones y mi piano con el tema del viaje de Hasekura Tsunenaga. Esta obra participará en el Festival de Arte de la Agencia para Asuntos Culturales (“Bunka-cho”; Agency for Cultural Affairs de Japón) de este año. Y es una producción de NHK Educational. El ensayo de la obra comenzará en octubre y actuaremos el 30 de octubre en Sendai Wakabayashi Bunka Hall, y el 6 de noviembre en Sogetsu Hall en Tokio. En el viaje de Hasekura le acompañaba el misionero Luis Sotelo, y la obra consiste en una conversación cómica entre Hasekura, que es un samurai serio del noreste de Japón y Luis Sotelo que es un misionero presuntuoso. Es una obra muy divertida y también hay partes que te hacen llorar. Trata del viaje de Hasekura que sale del noreste de Japón, pasa por Méjico y llega a España, ve al Papa en Roma y vuelve a Japón pasando de nuevo por Méjico y Filipinas. Espero que os guste.
En diciembre, daré conciertos con un workshop en las tres ciudades de Bolivia que son La Paz, Santa Cruz y Cochabamba.
Después de ello, siguiendo el CD “O MEU CAMIÑO”, que publiqué hace algún tiempo, después de hacer el camino de Santiago, estoy planeando crear un CD del camino de peregrinación de “Kumano Kodo” de Japón. Es un proyecto de conectar los dos caminos de peregrinación de España y Japón, y estamos planeando dar conciertos en algunos templos del camino de Kumano Kodo, como en el Templo de Kumano Honmiya Taisya y Kumano Hayatama Taisya.
Muchas gracias por todo y deseamos con sinceridad mucha suerte en todos sus futuros proyectos.